¿Cómo sabemos que la Biblia es verdadera y confiable?

1. La Biblia Afirma Ser la Palabra de Dios

La base de nuestra confianza no debe de ser la opinion de los hombres, sino el testimonio de la misma Biblia.

2 Timoteo 3:16 dice: “Toda Escritura es inspirada por Dios.” Eso significa que su fuente última no es la imaginación humana, sino Dios mismo.

2 Pedro 1:21 añade que los hombres “hablaron de parte de Dios, siendo inspirados por el Espíritu Santo.” Los escritores usaron su propio estilo, idioma y trasfondo, pero el mensaje vino de Dios.

En 2 Pedro 1:21 la palabra inspiración no significa “inspiración” en el sentido en que un poeta se inspira en la naturaleza o en la música.

La frase “siendo inspirados por el Espíritu Santo” literalmente transmite la idea de ser llevados (griego: pherómenoi) Como un barco impulsado por el viento, los autores fueron guiados por el Espíritu Santo. Ellos hablaron y escribieron libremente, usando su propio vocabulario, cultura y estilo—pero todo lo que escribieron fue exactamente lo que Dios quiso.

Así, la inspiración es a la vez divina (de parte de Dios) y humana (a través de los autores).

El origen de la Escritura es divino: Dios es la fuente.
El instrumento es humano: Dios usó a hombres como Moisés, David, Pablo y Juan.
El resultado es la Palabra de Dios inerrante: exactamente lo que Dios quiso darnos, sin error, confiable en todo lo que afirma.

Podemos decirlo de esta forma: Imagina el viento llenando las velas de un barco. Los marineros aún dirigen, pero es el viento el que da dirección y poder. De la misma manera, el Espíritu Santo “llenó las velas” de los escritores bíblicos, asegurando que lo que escribieron fuera la Palabra perfecta de Dios.

Si Dios es veraz entonces Su Palabra también debe ser verdadera y confiable. (Números 23:19; Tito 1:2),

2 con la esperanza de vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde los tiempos eternos,

2. La Biblia Ha Mostrado Confiabilidad a lo Largo de la Historia

La Palabra de Dios ha sido probada como el oro en el fuego:

Evidencia Manuscrita: Tenemos más de 5,000 manuscritos griegos del Nuevo Testamento, algunos que datan de pocas décadas después de los originales (como el Papiro 52, que se encuentra en la Biblioteca John Rylands, data al alrededor del año 125 d.C.). Eso es mucho más que lo que existe para Platón, Aristóteles o César. Los Rollos del Mar Muerto (descubiertos en 1947) mostraron que el texto del Antiguo Testamento de Isaías, copiado alrededor del 200 a.C., coincide casi palabra por palabra con lo que leemos hoy.
Preservación: A diferencia de los mitos que cambian con el tiempo, el texto bíblico fue copiado con sumo cuidado por escribas judíos y posteriormente por copistas cristianos. Lo que leemos hoy es lo mismo que leyeron los primeros creyentes.

3. La Biblia Concuerda con la Arqueología y la Historia

La arqueología confirma repetidamente los detalles de la Escritura:

Las ruinas de Jericó muestran muros caídos de una manera consistente con Josué 6.
La inscripción de Tel Dan (descubierta en 1993) menciona la “Casa de David,” confirmando la dinastía davídica.
El estanque de Betesda (Juan 5) fue puesto en duda durante años—hasta que arqueólogos lo descubrieron en Jerusalén.

Una y otra vez, los hallazgos respaldan el registro bíblico en lugar de contradecirlo.

4. La Unidad y el Mensaje de la Biblia

La Biblia son 66 libros, escritos por unos 40 autores a lo largo de 1,500 años, en distintos lugares y culturas—y aun así cuenta una sola historia unificada: el plan de salvación de Dios en Jesucristo. Desde Génesis hasta Apocalipsis, el mensaje es consistente y centrado en Cristo. Ningún otro conjunto de escritos en la historia se compara con esta unidad.

5. La Biblia Transforma Vidas

Finalmente, podemos confiar en la Biblia por su efecto en la vida de las personas. Hebreos 4:12 dice:

12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la división del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir los pensamientos y las intenciones del corazón.

“La palabra de Dios es viva y eficaz.” Por siglos, personas de toda cultura han sido transformadas—pecadores perdonados, los desesperanzados hallaron esperanza, los quebrantados fueron restaurados—por medio de su verdad. La filosofía, la política y la sabiduría humana no pueden hacer esto, pero la Palabra de Dios sí.

Resumen para los Estudiantes:
Podemos confiar en la Biblia porque (1) es la Palabra de Dios, (2) ha sido preservada fielmente, (3) está confirmada por la historia y la arqueología, (4) tiene un mensaje unificado centrado en Cristo, y (5) tiene poder para transformar vidas.